Las sagradas escrituras alegorizan el Camino Secreto como un Desierto, haciendo alusión al trabajo en solitario, que aunque estemos físicamente rodeados de las gentes y tengamos a nuestro lado personas muy queridas, en verdad estamos realmente solos y únicamente con la obediencia absoluta a nuestro Padre y nuestra Madre Divina, es posible recorrer el camino.
Las sagradas escrituras alegorizan el Camino Secreto como un Desierto, haciendo alusión al trabajo en solitario, que aunque estemos físicamente rodeados de las gentes y tengamos a nuestro lado personas muy queridas, en verdad estamos realmente solos y únicamente con la obediencia absoluta a nuestro Padre y nuestra Madre Divina, es posible recorrer el camino.
Comentarios
Publicar un comentario